¿Y Quién Demonios Soy Yo?

¿Quién soy? Una pregunta tan simple… pero tan compleja de contestar.

Esta es una de las preguntas que me hago a mí misma con frecuencia. Comienzo con lo básico: Me llamo Martha tengo 21 años, con 6 de experiencia. Provengo de la capital del mundo, la bella Ciudad de México. Vengo de una familia de clase media, soy católica, tengo un certificado de asistente de enfermera en el cual la paga es más o menos. También trabajado para un distrito escolar en el cual ayudo a niños con mucho potencial. Tengo un carrito que me lleva y me trae gracias a Dios. La lista puede seguir y seguir. ¿Pero… en realidad soy todo eso…? A veces creo que solo son etiquetas que nos inventamos para hacernos sentir importantes.

Si, si me llamo Martha. Un nombre no muy común en estos últimos años. Tengo 27 años y no me da vergüenza admitirlo, algunos me dicen "¡Ms. Ya está grande!" y otros "Eres tan joven, tienes mucho que vivir". ¿Quién los entiende? Eso de clase media es un decir, porque no somos ricos pero tampoco pobres, las estadísticas dicen que somos una familia pobre y de pocos recursos. Yo diría que modesta, nunca nada nos ha faltado pero hemos trabajado duro por ello. Eso que de que soy católica, quien decide como tiene que ser un excelente católico. De lo que estoy segura es que soy una persona de fe. Entiendo y respeto a todos el que ama a Dios y al que no, también. Somos libres de decidir que creer. Mis dos trabajos son muy mal pagados, pero alguien los tiene que hacer, sino quien se encargaría de el futuro y el pasado. Mi carro es un ¡Sobre Viviente! El no solo me transporta de milagro sino que Él es el milagro. Después de ser pérdida total, no solo una vez sino DOS veces, y de haberse roto la cadena del tiempo. Él sigue de pie, mugroso pero, GLORIOSO.

Pero también soy otras muchas más cosas, las cuales aún no conozco y no sé si algún día lo sabré. Hay cosas que ayer no me gustaba y hoy si, tal vez mañana también. Tengo talentos que ni imagino que existen dentro y otros que reprimo porque… según yo no los merezco. Esto de empezar a escribir es uno de esos talentos en los cuales siento que he reprimido. Según yo no tengo nada que decir. No soy experta en nada, pero para todo tengo una opinión. De seguro nunca la digo, para no ofender a nadie según yo.

Lo que he descubierto últimamente es que solo son miedos. Especialmente a ser rechazada. Si deporsi soy introvertida, y luego cayéndole mal a la gente, que va a ser de mí. Pero como dicen los niños, ya estoy grande y no puedo seguir como una cría con miedos esperando la aprobación de los demás. Tengo que experimentar y explorar mis capacidades. Hay una vida que tengo que vivir. No tengo la confianza suficiente en mi para exponerme al 100%, pero creo que empezando por expresarme es un buen comienzo.